Este año, la BBC publicó una noticia alarmante con los procesos de protección a la capa de ozono. La fabricación de espumas aislantes para casas que han producido algunas industrias de China, han estado emitiendo CloroFluoroCarbonados (CFC), generando un retroceso en los avances en la reducción de esta sustancia [1].

Los CFC son sustancias químicas gaseosas que degradan la capa de ozono. Se emplean en la producción de frío como la industria frigorífica, refrigeradores domésticos, aire acondicionado; Producción de plásticos expandidos, como poliuretano, poliestireno; producción de propelentes, como productos en aerosol aplicados en alimentos, cosméticos, insecticidas, pinturas; Producción de solventes para industria electrónica  en la limpieza de componentes[2].

La capa de Ozono es un gas suspendido en la estratosfera, que nos protege de los rayos ultravioleta. Si estos rayos llegan a penetrar el planeta de manera directa, pueden generar mutaciones en los genes de los seres humanos y demás seres vivos. Actualmente, existe un agujero del tamaño de la Antártica (23 millones de km2), que se ubica en el polo sur, en los meses de septiembre a octubre, por las condiciones idóneas: temperaturas muy frías con radiación solar[3]. Es importante mencionar que la degradación de la capa de ozono no tiene que ver con el calentamiento climático[4], pero si con volver zonas más secas y menos lluviosas.

Sabiendo la importancia de la capa de ozono. Hace 32 años, el 16 de septiembre de 1987, se firma el Protocolo de Montreal. El objetivo de este acuerdo busca comprometer a los países a la protección de la estratósfera terrestre, para preservar la vida en el planeta, por medio de la disminución y eliminación de los CloroFluoroCarbonados (CFC), en los productos que producen o contienen este químico. En esta misma fecha, en 1994, se declara el Día Internacional para la Preservación de la Capa de Ozono, propuesto por la Asamblea General de las Naciones Unidas.

Las predicciones de los científicos dan como resultado una recuperación de la capa de ozono para 2030 en el hemisferio norte, mientras que en el hemisferio sur estará lista para 2050, y regiones polares (situaciones más críticas) para 2060; siempre y cuando se cumpla el Protocolo de Montreal [5].

Es importante que nosotros como ciudadanos seamos parte de la solución y no del problema. Si nosotros no consumimos productos que produzcan CFC, llegaremos a cumplir las predicciones que nos muestran los científicos sobre la recuperación de la capa de ozono. Tenemos que saber de donde proviene lo que compramos, si de industrias piratas que deterioran nuestro planeta [4] o industrias certificadas de países que cumplen con el Protocolo de Montreal.

Identifiquemos los productos que tenemos, que pueden generar CFC, según la Información del US Environmental Protection Agency (EPA), el aire acondicionado de los automóviles y de los edificios, las neveras, las espumas de aislamiento, productos de limpieza industrial[6], sprays de aromatizantes, limpieza corporal y mata insectos. Todos estos productos pueden emanar dichos gases, así como los mencionados al comienzo de este artículo. Indagar con las marcas del producto sobre si su producto es parte del problema o de la solución en la protección de la capa de ozono, ayuda a promover una Sociedad Sostenible.


[1] https://www.bbc.com/mundo/noticias-48381530

[2] https://www.mendoza.conicet.gov.ar/portal/enciclopedia/terminos/CompClorofl.htm

[3] https://www.bbc.com/mundo/noticias-45529409

[4] https://hsbnoticias.com/noticias/vida-moderna/por-que-es-importante-la-capa-de-ozono-ojo-este-16-de-septie-559386

[5] https://www.efeverde.com/noticias/capa-ozono-quimico/

[6] http://klimat.czn.uj.edu.pl/enid/2__Agujero_de_la_capa_de_ozono/-_el_agujero_de_ozono_y_los_CFC_34n.html